"... ¿ y qué decir en cuanto al maestro de escuela, ese pedagogo harapiento y muerto de hambre de nuestros días? No me refiero ciertamente al ser rutinario que toma su profesion como una pesada carga, si al que, rodeado de niños se siente solicitado por la atmósfera infantil que lo rodea y trata de inocular en aquellos cerebros, apenas formados, las ideas de humanidad que el mismo acaricio cuando era joven. Sufriarás cuando el discípulo a quien por fuerza te empeñas en que aprenda latín, no da pìe con bola, no se asimila el idioma de lacio, pero observas en cambio su belleza de corazón y como se entusiasma en recitar la historia de Guillermo Tell y y con qué pasión ha leído los versos de Schiller:
... jamás temblé ante el hombre libre y sí, al romper las cadenas del esclavo...
Procuren desarrollar aquellos gérmenes de libertad, aquel odio contra los tiranos, esto contrabalanceará el perpetuo sermón doméstico que trata d anular tan bellas cualidade, supeditándolas a ese necio respeto al cura, al presidente, al juez, a todo el arbitrario sistema inventado por el autoritarismo para refrenar los impulsos de la libertad, las sacudidas de la inteligencia hacia la investigación.
Nuestra mision es sembrar el bien, difundir la luz, y por medio de la instrucción, libre de todos los perjuicios de la rutina, crear corazones que odien la tiranía y desde la infancia maldigan a todos los explotadores. La enseñanza no es ese pesado repetir transmitido de una a otra generación, sin examen, sin variación, con la monotonía del pendulo; esa es la instrucción burguesa que, cual pesada mole, comienza a perturbar las facultades mentales del niño a fin de cercenar en su cerebro todas las nobles emulaciones por lo grande, lo humanitario lo bello.
La burguesía ha desnaturalizado de tal suerte las fuentes primeras donde se desarrollan las facultades del ser, que ha logrado convertir lo que debía ser la escuela - el templo de la verdad- en un presidio, y al que debía ser primer magistrado - el profesor- en el carcelero.
... Hay que caminar adelante, o con la burguesía, que te paga malamente tus servicios y que nos relega enteramente o inoxicar los cerebros infantiles con los venenos de la autoridad, la religión y la propiedad, ... o educar a la juventud en el verdadero camino de la emancipación del hombre, en las sanas doctrinas de la equidad, de la solidaridad y de la libertad..."
como futuros profesores ya todos sabemos qe tenemos en nuestras manos a las futuras generaciones, por lo tanto en nuestras manos esta el devenir del país, es por esto que no podemos generar en la conciencia de nuestros futuros educandos una mentalidad autoritaria o de egoismo, más bien debemos construir personas, y por ende una sociedad, que se base en la solidaridad y en el respeto mutuo, que se den cuenta de una ves por todas que tienen a una persona que esta al lado de él, que este no es el único en esta sociedad, debemos hacer desaparecer esta sociedad egoista en la que nos encontramos viviendo, ustedes me preguntaran ¿pero con el terremoto, con la teletón, etc se ve una solidaridad enorme entre los chilenos?, pero yo les pregunto ¿por qué esa solidaridad no se puede dar día a día, por qué siempre pensamos en nosotros y no en los demás?, nosotros somos actores fundamentales en el cambio social y más aún como futuros profesores de historia, no nos podemos restar a las luchas sociales debemos estar siempre luchando junto al pueblo, nosotros por obligación debemos tener conciencia social, y tenerla aunque te tachen día a día de resentido social... compañeros y futuros colegas no nos callemos, no te dejes apalastar por las clases dirigentes, lucha con todas tus fuerzas, y tengan muy presente que la única lucha que se pierde es la que se abandona... Para concluir recuerden y tengan muy presente que nosotros, hoy en día, somos privilegiados al estudiar en la universidad, y utilisemos esa oportunidad de estudiar esta linda carrera (pedagogía) para que aún más gente puede obtener ese privilegio y poco a poco transformar la educación en un derecho para todos, como debería ser...
No hay comentarios:
Publicar un comentario